En el pasado, el ciclo menstrual ha sido considerado tema tabú en ciertos entornos sociales, sin embargo, es uno de los factores más influyentes en cuanto al rendimiento deportivo en deportistas femeninas. La comunidad científica ha estudiado el ciclo menstrual en este tipo de deportistas y muchos artículos han sido publicados en la pasada década. Muchos profesionales han tratado de encontrar la verdad absoluta, y la “regla” que se aplicaría a todas las deportistas, no obstante, estas reglas absolutas no son habituales cuando se trata de aplicaciones prácticas en deportistas (ya que cada individuo es diferente). Este artículo tiene como objetivo ser una guía práctica para entrenadores y deportistas femeninas de manipulación de estas variables para el entrenamiento.
El ciclo menstrual y la prevención de lesiones
Las lesiones, en relación al ciclo menstrual, es una de las principales preocupaciones para muchas deportistas. Algunos estudios han presentado un mayor ratio de relación con lesiones de ligamentos en deportistas femeninas en comparación con el género opuesto. Otras investigaciones son todavía poco precisas en este problema, ya que algunas de ellas no han mostrado ninguna diferencia en cuanto a lesiones entre mujeres y hombres.
Algunos estudios presentan un mayor ratio de lesiones del ligamento cruzado anterior durante la fase folicular, con una probabilidad más alta durante la fase ovulatoria (del 10º al 14º día). Esto podría ocurrir debido a un aumento de la fatiga muscular durante esta fase, provocada por un aumento en segregación de estrógenos, progesterona y relaxina.
Otro factor relacionado con este tipo de lesiones es el aumento de la laxitud del ligamento, una cuestión de gran controversia, ya que muchos estudios presentan resultados diferentes. Algunos de ellos demuestran mayor laxitud de ligamentos durante las fases ovulatoria y lútea (del 14º al 28º día), asociada de nuevo al aumento de los niveles estrógenos y progesterona, así como de testosterona.


El uso de medicamentos anticonceptivos orales ha demostrado disminuir el riesgo de lesione por traumatismo de tren inferior y espalda durante las fases premenstrual y menstrual. No obstante, el uso de estos métodos anticonceptivos ha hallado algunos conflictos en pruebas médicas con sustancias dopantes.
La ciencia está todavía lejos de encontrar cuál es la principal razón de las lesiones de ligamento cruzado anterior, y muchos otros factores relacionados con el ciclo menstrual que podrían ser grandes contribuidores a estas lesiones.
Por lo tanto, es necesario un enfoque más holístico cuando se trabaja en la prevención de estas lesiones (estrés, volumen de entrenamiento, fatiga crónica, etc.).
Rendimiento deportivo
Cuando se trata de rendimiento deportivo, la mayoría de estudios se dividen en capacidad aeróbica y anaeróbica.
En términos de capacidad aeróbica, algunos enfoques sugieren que hay un leve descenso de la misma durante la fase lútea avanzada, y las deportistas rindieron mejor durante la fase folicular. El por qué de estos fenómenos es debido a los aumentos cíclicos en hormonas endógenas esteroides femeninas.
Por otro lado, en cuanto al rendimiento anaeróbico, el mismo estudio que dice que la fase folicular favorece el rendimiento aeróbico, reporta que no se observaron cambios en saltos y ejercicios de sprint. Otros estudios sugieren que los niveles de fuerza son mayores durante la fase folicular y demostraron que una mayor intensidad en entrenamientos de resistencia durante esta fase resultó ganancias mayores en fuerza y masa muscular en comparación con el mismo entrenamiento durante la fase lútea.
La ciencia no ha encontrado una respuesta definitiva a esta pregunta, y esto podría ser debido a las necesidades y respuestas individuales de cada deportista, ya que cada una de ellas reacciona diferente a los cambios hormonales y psicológicos de su cuerpo.
Aplicaciones prácticas
- La prevención de lesiones debería ser nuestra principal preocupación a la hora de periodizar, tomando el ciclo menstrual como referencia. Será importante limitar las situaciones de contacto durante la fase ovulatoria y los días previos a la menstruación.
- No está totalmente claro si la laxitud del ligamento cruzado anterior es la principal causa de lesión; la fatiga muscular parece ser más relevante en este tipo de lesiones.
- El rendimiento aeróbico parece disminuir durante la fase lútea avanzada, ya que las deportistas muestran fática y dificultades en el sueño durante estos días.
- El rendimiento anaeróbico podría aumentar durante la fase folicular, la cual podría ser un buen momento para aumentar el volumen de entrenamiento de fuerza, obteniendo mejores resultados.
Limitaciones prácticas
- Debería establecerse una buena relación previa a la implementación de este método. En el caso contrario, la deportista podría sentirse intimidada cuando se le pregunte sobre su ciclo menstrual.
- Si la deportista es menor de edad, los padres deberían tener conocimiento de la aplicación de este método y dar su consentimiento al entrenador.
En conclusión, estos estudios no siempre pueden ser aplicados todos los individuos, pero se puede establecer un recorrido claro para el desarrollo de un plan. Con el propósito de paliar las carencias entre la ciencia y las aplicaciones prácticas, se podrían implementar encuestas individuales de bienestar, y estudiar los resultados y las reacciones durante las diferentes fases. Cada deportista es un mundo, y antes de decidir si los datos expuestos pueden ser aplicados, se debería establecer una buena relación deportista-entrenador.
Traducido y adaptado por Mario Lop Gargallo
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